EXITO PERSONAL

domingo, 7 de agosto de 2016

TODO ES INÚTIL SI ME QUEDO SOLO EN PENSAMIENTOS Y PLANES Y NO PASO A LA ACCIÓN.
Solamente la acción es la palanca que pone en movimiento la gran planta de energía que hay en mi personalidad, la acción es el combustible que lleva hacia el éxito. Por eso: Procederé ahora mismo.
El temor detiene al éxito. Al temor se le vence con la acción.
Al tigre del terror lo hace huir el conejito de la acción. Empieza a obrar y el temor se va alejando. La luciérnaga sólo proyecta luz cuando va volando. Mi personalidad solamente podrá demostrar los valores que tiene si me dedico a obrar.
No dejaré las tareas de hoy ni las postergaré para mañana. Es mejor fracasar actuando que quedarse sin hacer nada y fracasar lo mismo.

Haz trabajar tu cerebro: Recuerda que una idea, una sola idea,  puede darte fama, fortuna, felicidad y santidad.
Procederé ahora mismo. Procederé ahora mismo. Procederé ahora mismo. Estas palabras repetidas se me tienen que convertir en una costumbre como la de respirar. 

Cuando el fracasado exclame: "dormiré una hora más", yo me levantaré diciendo "Procederé ahora mismo". Cuando el perezoso  esté pensando:"Quizá no voy donde tal cliente porque me va a recibir mal", yo iré hacia dicho señor repitiéndome: "Procederé ahora mismo". Cuando el otro pase por frente a la puerta sin llamar porque teme que no lo atiendan, levantaré mi mano para tocar a la puerta y mientras tanto iré repitiendo: "Procederé ahora mismo". 
Cuando desanimado oiga una voz traicionera que me grita: "ya no luchemos más que todo es inútil", levantaré mi mano de vencedor y diré entusiasmado: "Procederé ahora mismo" y transitaré por los caminos por donde un fracasado no se atreve a andar y trabajaré cuando un fracasado se dedicaría a descansar y hablaré mientras un fracasado quedaría en silencio. Afirmaré "todavía es posible", cuando un pesimista exclame: "ya es demasiado tarde".
"Mañana" que sea la palabra de los haraganes. Mi palabra es "Ahora" porque ese es mi tesoro. Cuando el león tiene hambre ataca. Yo tengo hambre de éxitos y quiero obrar para conseguirlos, pero no desde mañana, sino desde "ahora mismo". Mi momento oportuno es ahora. Si dejo para más tarde el empezar la obra, Dios puede vender a otros los éxitos que tenía para mí. El mundo es de Dios pero Él se lo alquila a los valientes.

¡Procederé ahora mismo!



No hay comentarios:

Publicar un comentario